El doctor Enrique Crespo ha
retirado las grapas a Paco Ureña en el Hospital Quirón de Madrid, ocho días
después de haberle intervenido de la cornada cerrada que recibió en Vic
Fezenzac (Francia) el lunes 16 del presente, y de la que no se quiso operar
hasta el martes 24.
Tanto la herida como la pierna
están bien. No obstante, el facultativo ha indicado que, para acabar de
cicatrizar, debe permanecer en reposo unos tres días más. Incluso más
que cuando tenía las grapas.
A partir de entonces, deberá
comenzar a realizar ejercicios isométricos de isquiotidiales; no correr ni
estar mucho tiempo de pie. Según prevé el doctor Crespo, a partir del próximo
lunes podría empezar los entrenamientos fuertes, pero de forma progresiva.
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