Noche inolvidable en Lorca con
el duelo Palomar-Victorino, con lleno de “no hay billetes” y éxito de
solidaridad en la donación de sangre
El IV Ciclo Cultural Taurino
organizado por el Club Taurino de Lorca continúa por la senda del éxito. Una
buena muestra de ello son las dos recientes actividades que han tenido lugar
este jueves, 7 de febrero, y la noche del viernes 8, donde la afición ha vuelto
a dar muestras de su compromiso y solidaridad.
La primera buena noticia fue el
éxito del IV Maratón de Donación de Sangre que el Club Taurino viene
organizando junto con el Centro Regional de Hemodonación. Desde las 17 a las 21
horas del jueves, el goteo fue incesante en el Hospital Santa Rosa de Lima de
la Ciudad del Sol, llegándose a alcanzar la cifra de 78 donantes, que podrían
haber sido más si no es por la particularidad de que muchos de los que
asistieron con la intención de donar su sangre no lo pudieron hacer por
diversas razones médicas. Una vez más, el mundo del toro volvió a demostrar su
humanidad y solidaridad, en unos momentos en los que además las reservas de
sangre se encuentran bajo mínimos.
Por su parte, la noche del
viernes 8, el Aula de Cultura de la Fundación Cajamurcia registró un “lleno de
no hay billetes”, congregándose más de 200 personas para presenciar una
inolvidable velada en la que el diestro soriano José Luis Palomar y el ganadero
Victorino Martín, actual presidente de la Fundación Toro de Lidia, rememoraron
bajo la batuta del periodista Íñigo Crespo la llamada “corrida del siglo” de
junio de 1982, el ascenso y consolidación de la ganadería de Victorino, los
cambios habidos en el toreo desde los años ochenta hasta la actualidad y, por
supuesto, la situación actual de la Fiesta. Así, tanto Palomar como Victorino
abordaron las fortalezas y debilidades de la tauromaquia actual, sus
principales problemas a nivel interno y externo, sus prioridades y necesidades
y la estrategia a seguir para su defensa en el contexto de una sociedad
globalizada y de una clase política desconocedora de la verdadera dimensión del
mundo taurino y sometida además a las presiones del lobby animalista.
La tertulia, que duró cerca de
dos horas, como una buena tarde de toros, dio lugar también para momentos de
humor, anécdotas y curiosidades de todo tipo que hicieron la delicia de los
aficionados, por lo que nadie se movió de sus asientos. Una noche, sin duda,
para el recuerdo, que como tal quedará grabada en la memoria de los
aficionados, que pudieron fotografiarse e intercambiar impresiones con los
tertulianos.
El ciclo continuará el próximo
fin de semana, cuando está previsto el viaje a las ganaderías de Partido de
Resina y Dolores Aguirre, siguiendo también abierta la exposición de pintura de
José Ángel Ramírez Cuenca en el Palacete Huerto Ruano hasta el próximo 25 de
febrero y reanudándose las tertulias el jueves 21 con la presencia del ganadero
Antonio Miura y del matador de toros sevillano Manuel Ruiz “Manili”.
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