Doble Chimenea de Platino para
Miguel Ángel León y Juan Miguel con la que Valdemorillo premia la savia nueva y
aplaude la “Oportunidad” bien aprovechada por los dos toreros que abrieron
puerta grande en su alternativa en el ruedo local.
El Ayuntamiento completa el
palmarés de esta Feria de San Blas otorgando el VIII Trofeo La Candelaria a
Libanito, del hierro de Guadalmena, el jabonero que salió tercero de toriles en
la corrida del domingo 11, aplaudido ya en el arrastre. Precisamente ante este
toro cuajó Miguel de Pablo la que también ha merecido ser premiada, con Mención
Especial, como la mejor faena entre las registradas en estas tres de abono.
El acto de entrega de los
simbólicos trofeos, que pasan a estar representados por tres piezas diseñadas
por el escultor Alfonso Leal, se entregarán el viernes 23 de febrero, a las
20,00 h., en el Auditorio de la Giralt Laporta, en un acto abierto al público.
Reivindicándose siempre por su
condición como Feria de la Oportunidad, la de San Blas 2018 ya tiene ganadores,
dos jovencísimos toreros, doctorados como tales en este mismo ciclo, que
hicieron de la tarde de su alternativa la mejor ocasión para abrir Puerta
Grande en este arranque de calendario, haciendo valer esa “savia nueva” que es
el otro gran premio, a juicio del Ayuntamiento, esa voluntad de dar lo mejor
sobre el albero, bajo la Cubierta local, para hacer de Valdemorillo “la llave”
que realmente abra más puertas ahora que ambos acaban de convertirse en
matadores, justo en el despertar de la temporada. Por ello, y contando con la
unanimidad del Jurado, la IX Chimenea de Platino se concede ex aequo a Miguel
Ángel León y Juan Miguel, reconociéndoles su acierto al saber aprovechar el
paso por este coso, máxime en fecha para ellos inolvidable como lo fue la de su
alternativa.
Dos fueron las orejas paseadas
por el de Gerena, uno más en la lista de los acunados en esa tierra de toreros.
Un apéndice por cada uno de los de su lote de Monte la Ermita, si bien ante el
primero puedo llegar a acariciar ya la segunda, fuertemente reclamada por el
tendido. Y también toco peló, en sus dos intervenciones, el de Colmenar de
Oreja, quien ya se mostró resuelto a cumplir el sueño de salir a hombros cuando
el pasado 26 de enero, al presentarse oficialmente la Feria, insistió en la
importancia del compromiso que supone estar en los carteles de Valdemorillo.
En cuanto al triunfo entre los
que pasaron por corrales, en este caso el reconocimiento es para Libanito, un
jabonero sucio de número 34 y 490 kilos de peso, con hierro de Guadalmena, que
salió el tercero a la arena en la corrida del domingo 11. Para la divisa roja,
gualda, roja se va así el trofeo al mejor de los astados, siendo ya aplaudido
en el arrastre el ejemplar ahora galardonado. Un bravo con el que, además, se
dio la esperada comunión toro torero, ya que a su entrega se unió la firmeza
con la que supo lidiarlo Miguel de Pablo, merecedor precisamente de una Mención
Especial, igualmente otorgada por este Consistorio como autor de la mejor faena
de esta Feria de San Blas.
El único pero en esta relación,
la ausencia de ganador entre los novilleros, que tuvieron su cita con una
ocasión que no terminó de presentarse en la forma deseada, quedando desierta la
XIV Chimenea de Oro. Y en cuanto al reparto de trofeos, ahora representados en
la piezas diseñadas por el escultor Alfonso Leal, la entrega se hará en un acto
abierto al público, a celebrar el viernes 23 de febrero, a las 20,00 horas, en
el Auditorio de la Casa de Cultura Giralt Laporta. En el mismo se contará con
la presencia de las autoridades locales y de representantes del jurado, que en
esta edición ha estado formado por Jorge Fajardo, presidente de la Federación
Taurina de Madrid, Félix Bravo Villena y Justo Martín Ayuso.
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