Séptimo día de encierro, con los toros de Adolfo Martín. Un Domingo con las calles a rebosar de corredores para ponerse delante de estos astados de presencia imponente. Limpio encierro sin heridos por asta de toro.
Con mucha velocidad salió la manada del corral, que permaneció hermanada con toros y bueyes durante los primeros metros, abrían el recorrido los bueyes y los cerraban tres cárdenos de Adolfo.
Desde el inicio de la carrera por la cuesta de Santo Domingo y
hasta la curva de Mercaderes con el principio de Estafeta, permanece unida toda la manada y es en ese tramo y ya hasta la plaza donde se adelanta uno de los toros, entrando en solitario en la Plaza.
Es con este toro adelantado con el que se producen las carreras mas bellas y vibrantes del encierro. La velocidad de los toros provoca algunas caídas y golpes de los mozos.
Se produce un momento de apuros en la bajada al callejón donde el primer toro adelantado, alcanza con el pitón derecho la espalda de un mozo, que siente el calor del asta y el miedo de cerca.
El resto de los toros se van abriendo quedando uno de los morlacos retrasado, entrando en solitario en la plaza.
A pesar de estar disgregada la manada a partir de mitad del recorrido se ha producido un encierro relativamente rápido, con una duración de dos minutos y cincuenta y un segundos.
Parte de Heridos, Cuatro traslados, tres de ellos por contusiones craneales en Santo Domingo, Mercaderes y Estafeta. Un herido más por traumatismo Abdominal. Todos los heridos han sido trasladados a los centros Hospitalarios de Pamplona.
Para esta tarde, toros de Adolfo Martín para los diestros Diego Urdiales, Manuel Escribano y Alberto Aguilar.
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