El zaragozano firmó en la final
del certamen una muy buena actuación para alzarse con el triunfo por delante
del torrentino Mario Hueso y el granadino Romera que junto a Ernesto Marín
fueron los cuatro participantes más destacados.
Jornada primaveral en pleno
invierno que acogió la final de esta cuarta edición del Bolsín Serranillo que
un año más han organizado Purita Linares y su hija Vanessa Santos que
agradecieron, en la entrega de premios, las ayudas y facilidades dadas por el
ganadero Matías Carretero para que esta edición del certamen saliera adelante.
Un certamen que pasará a la
historia con el nombre de Diego Aznar como triunfador tras pasar muy firme por
la fases previas y tener una actuación muy rotunda en la final ante una de las
becerras más importantes del Bolsín. La de Carretero despistó en el caballo
pero en la muleta sacó un muy buen fondo, clase y ritmo.
Aznar gustó y se gustó en un
trasteo con su sello personal de toreo vertical, mano baja y remates con mucho
sabor. Tanto con la muleta en la mano diestra como por naturales, el de
Zaragoza puntuó para alzarse como ganador. La segunda plaza fue para un Mario
Hueso intermitente a lo largo certamen pero dejando una nota alta en el
conjunto de sus actuaciones. Templa con mucho gusto y sobre todo tiene
capacidad para saber que hacer en cada momento en función de las condiciones
del animal. Otro nombre, sin duda, a tener en cuenta y seguir la pista.
Cerró el pódium en tercera
posición Romera, que pasó por el Bolsín de manera muy serena y evidenciando el
oficio aprendido en unas actuaciones de más a menos. Sin estar entre los tres
primeros cabe destacar también a Ernesto Marín, que si bien no tuvo suerte con
la becerra en la final, deja buenas sensaciones con sus trasteos en las fases
previas sobre todo en semifinales.
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