martes, 13 de agosto de 2013

El Cordobés se baña en el Sol, no sale por la Puerta Grande.

PLAZA DE TOROS DE HUESCA
Toros de la Palmosilla
Manuel Diaz "El Cordobés", oreja / oreja
Juan José Padilla, silencio / oreja
David Fandila "El Fandi",silencio / oreja con petición 2

Presentación del Hierro de La Palmosilla en Hueca, con lleno en los tendidos.
Se llevo sin dudas el lote Manuel Díaz, uno dulce y con las fuerzas medidas, al que le enjareto faena en terrenos de sol, lugar donde sus partidarios, suelen solicitar el ya tradicional salto de la rana. Salto que realizo el torero para el deleite de la grada, estocada certera y oreja. Un segundo mas encastado lo llevo y mando. Mucho le dieron en la lidia del caballo y llego a voltear hasta en dos ocasiones, aún así aguanto la lidia y el Cordobés manejo con soltura la pañosa, esta vez en terrenos de sombra. logró otro trofeo. que no le valieron para salir por la Puerta Grande. Que no pudo salir, pues en Aragón es preciso 2 orejas en un toro, para salir por la Puerta Grande.

No tuvo la misma suerte en su primero Padilla, lo entendió, templó, mandó y jugo todas sus cartas, incluidas las ya sabidas banderillas. En la muleta redondos y naturales, finalizados con toreros desplantes. Erró con los aceros y fue silenciada su labor. Aguardaba un quinto en los corrales, un toro mas complicada, con el que Juan no se guardo nada. quería la puerta Grande que su antecesor en faena, ya tenía en su mano. Redondos y naturales que calaron en el público, que jaleaban al diestro Jerezano. Una tanda de naturales mas relajado y sentido. Mato de estocada algo trasera y asomaron los pañuelos al viento con petición de trofeos. Uno le fue concedido a pesar de que el público solicitaba con ahínco el segundo apéndice. Dos vueltas al ruedo y bronca al presidente.

El Granadino Fandi, lidio con la mas fea. Dos toros desiguales de juego y presentación. Al primero flojo de remos, lo intento, banderillas con poder y obligando al toro, pero en la muleta el burel no podía mantenerse. Lo pasaporto y recibió silencio. Al sexto de la tarde, tampoco era un deshecho de virtudes, lo puso todo el Fandi con pases a diestro y siniestro, sin mucha ligazón, estocada algo caída y oreja por el esfuerzo.

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