El torero peruano se sobrepuso
a un lote de escasas opciones de lucimiento. Firmó pasajes de gran interés en
una tarde plomiza.
Andrés Roca Rey firmó ante el
tercer toro de la tarde una faena plena de autoridad, mando y sabiduría,
ejecutando series de derechazos con mucha transmisión en los tendidos.
Destacaron sobre todo tres series en redondo, antes de un final muy poderoso en
cercanías, donde se pudo volver a observar la mente privilegiada de Roca Rey
para extraer agua de un pozo prácticamente vacío. Fue ovacionado al término de
su labor.
El quinto de la tarde, segundo
del lote de Roca Rey, fue devuelto por inválido, saliendo por él un sobrero de
la misma ganadería al que el limeño saludó con emocionantes gaoneras en el
centro del ruedo, rematadas con una larga cambiada de rodillas poniendo la
abarrotada plaza en ebullición. También fue devuelto este ejemplar, saltando
ahora al ruedo un toro de José Luis Marca. Deslucido y sin clase alguna el
astado, que no permitió en absoluto el lucimiento de un Roca Rey muy valiente y
muy dispuesto.
FICHA DEL FESTEJO
Toros de Juan Pedro Domecq y un sobrero tris de José Luis Marca.
Alejandro
Talavante: silencio en ambos.
Andrés
Roca Rey: ovación y palmas.
Posada
de Maravillas, que confirmaba alternativa: silencio y
silencio.
Incidencias.- Lleno
de no hay billetes en tarde soleada.
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