El
matador de toros peruano cortó dos orejas en el coso francés.
Andrés Roca Rey cortó esta
tarde dos orejas en la plaza francesa de Béziers, una a cada toro del lote que
le correspondió en suerte. Frente al tercero del festejo, el limeño puso la
plaza en pie con un ajustadísimo quite por saltilleras, antes de arrancar su
faena con el pase péndulo. Roca Rey continuó toreando al de Núñez del Cuvillo
con sumo gusto y un gran concepto del toreo por ambos pitones. Se apagó pronto
el oponente y el peruano acortó distancia en un epílogo de faena emocionante.
Se pidieron dos orejas pero el presidente concedió únicamente un apéndice.
La voluntad de Roca Rey le sirvió para cortar
otra oreja del sexto de corrida, un toro noble aunque con muy poco fuelle. El
espada peruano fue todo voluntad y entrega ya de salida, galleando con el
capote a la espalda para ponerlo en suerte al caballo de picar. Comenzó su
faena de muleta toreando de rodillas y haciendo sonar rápidamente la música,
pero el toro de Cuvillo no le permitió más que elaborar una faena plena de
convicción y compromiso. Paseó otra oreja tras estocada y descabello. No pudo salir
en hombros por la Puerta Grande debido a que en la plaza de Béziers son
necesarias dos orejas en un mismo toro para poder hacerlo, pero dejó una
gratísima sensación entre el público francés.
FICHA
DEL FESTEJO
Plaza de Toros de Béziers. Tres
cuartos de entrada.
Toros de Núñez del Cuvillo.
Sebastián
Castella: ovación y dos orejas.
Alejandro
Talavante: oreja y ovación.
Andrés
Roca Rey: oreja con petición de la segunda y oreja.
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