Feria
de Olivenza novillada del domingo 8 de marzo.
Gran ambiente en la grada y en
la feria por ver la vuelta a los ruedos de Posada de Maravillas, el regreso de
Ginés Marín tras el triunfo del viernes pasado y las expectativas por los debut
de Aguado y Carballo.
Roto en el primero, Posada se dejó llevar por la emoción y
el sentimiento ante un novillo de El Freixo, que juzgo por ambos pitones con torería
y enjundia. La versión más torera del extremeño se dejó ver el ruedo de
Olivenza, cadencia, plasticidad y mando en su trazo, limpio en sus naturales,
enrocados en sus redondos, todo con medida y pausas necesarias, ha vuelto
Posada. El final lo pasaportó de una tizona certera, que le puso los dos
primeros trofeos de la tarde en su mano. Sus lágrimas empañaban su rostro
mientras intentaba hablar entrecortado para dar las gracias por este reencuentro
con la afición.
No fue su segundo un novillo
para dudar, no llego el acoplamiento y las ganas de Posada se diluían a medida
que avanzaba la faena. Lances de capa y algún
natural suelto fue lo más destacado.
Raza en novillero y novillo en
el segundo de la tarde para Ginés Marín.
Un inicio portentoso que fue incresendo en virtud y torería. Lo tiene en la
mano y sabe aprovechar cada muletazo, cada trazo, cada instante delante de la
cara del toro. La figura del joven novillero cada día está más cuajada, su
derroche de facultades, hace fácil lo difícil y esta mañana lo ha dejado
patente. No dejo pasar la oportunidad de sumar en su esportón con una faena
medida y bien rematada con un espadazo que dejo sin puntilla al burel.
Su segundo nos dejó ver a un Marín
más asentado y puro, ante una faena bien ejecutada con pasajes de mucha
transmisión y bella factura. Una mañana redonda de Marín que se antoja
prometedora para esta temporada.
“Panera”, no fue el novillo
deseado para el debut del sevillano Pablo
Aguado, ante un novillo áspero y con movilidad que no permitió al debutante
expresar su concepto del toreo.
Se desquito en su segundo,
llevando al burel embebido en la muleta, con un antagonista colaborador y con
buen son. Asentado en el albero extremeño, llevo al novillo con mucho temple y
rematado con soberbios pases de pecho. La
versión del Aguado tomo vuelo con su buen concepto en pases en redondo y
soberbios pases de pecho, que fueron jaleados por la grada. Pronto llegó al
tendido su forma de entender el toreo, naturales largos y bien llevados a los
que siguió remates con mucho pellizco. Una enfervorecida grada premio su labor
con dos apéndices tras una buena estocada.
El extremeño Carballo llego y topó, debut y dos
orejas ante un novillo que le permitió expresar su concepto del toreo. Unas
maneras de ver y entender el toreo, fresco, valiente y con una firmeza que
sorprendió, fueron sus armas de presentación. Dejó buenas formas en sus manejos
de capa y muleta, variado, vistoso y gustándose en cada lance, arropado por el
paisanaje y foráneos, no podía tener mejor recompensa.
Si vibrante fue el inicio a porta
gayola con el capote a la espalda, no menos fue el inicio de faena, donde
derrocho todo su valor ante el último de la tarde. Carballo tuvo la tarde en su
mano y la aprovecho con creces. Su forma de entender el torero caló rápido en
la grada. No mató a la primera pero no fue obstáculo para sumar un apéndice e
igualar en número de trofeos a Ginés Marín.
Ficha
del Festejo
Novillos de El Freixo, de buen juego en líneas generales.
Posada
de Maravilla, dos orejas /silencio
Ginés
Marín, dos orejas / oreja tras aviso
Pablo
Aguado, palmas / dos orejas
Juan
Carlos Carballo, dos orejas tras aviso/ oreja
Incidencias.- Algo más de media plaza en mañana de
agradable temperatura. Obligaron a saludar a Posada al finalizar el paseíllo y
este invitó a sus compañeros a unirse a él. Aplausos al primero en el arrastre.
Aplausos al segundo. Debutó con los del Castoreño Mario Benítez de la cuadrilla
de Pablo Aguado. Aplausos al sexto en el
arrastre. Se desmonteran Francisco Cervantes y Álvaro López de la cuadrilla de
Aguado en el séptimo. Aplausos al séptimo en el arrastre. Aplausos al octavo
novillo que cerraba una mañana de triunfos. Los cuatros novilleros abandonaron
el coso a hombros de los capitalistas.
Pablo
Aguado debutó vestido de grana y oro ante un novillo de El Freixo,
de nombre “Panera”, número 11, de
capa castaña, de 435 kilos, nacido en julio de 2011.
Juan
Carlos Carballo debutó vestido de turquesa y oro ante un novillo
de El Freixo, de nombre “Bullidora”,
número 15, de capa negra, de 460 kilos, nacido en julio de 2011.
No hay comentarios:
Publicar un comentario