Volvía el limeño Andrés Roca Rey a los ruedos tras
su grave percance en la pasada feria de Málaga a enfundarse el traje de luces
para reaparecer en Palencia.
Le correspondía en suerte el tercer toro de la tarde
de nombre "Marismeño” y de 502 kilos de peso en la romana
del hierro de Charro de Llen, que sustituía a la corrida titular.
Un toro protestado por el
respetable, que se mantuvo en el ruedo, y al que el limeño inicio el trasteo
con los pases cambiados por la espalda como en el suele ser habitual, en el
centro del anillo, en uno de los lances cambiado el toro hace por el joven
torero, propiciándole una tremenda voltereta, intentando Andrés agarrarse a los
pitones para una mejor acción del toro, y ensañándose con él al caer en el albero, rápidamente
es asistido y trasladado semi-inconsciente a la enfermería, de donde se le traslada a Hospital Río Carrión
con una “fuerte conmoción cerebral”, según las primeras valoraciones del equipo
médico.
Parte Médico de Andrés
Roca Rey:
“Cogida, presentando conmoción cerebral y
traumatismo craneoencefálico. Pasa a la enfermería, donde es monitorizado,
objetivándose constantes vitales, dentro de la normalidad. Glasgow 13 [NDR la
Escala Glasgow evalúa el nivel de consciencia; el nivel 13 hace referencia a un
traumatismo craneoencefálico moderado].
Reflejos normales, exploración neurológica:
desorientación temporo-espacial y visión borrosa. Explorar: contusión erosiva
en región cervical.
Se traslada al Hospital Río Carrión en ambulancia
monitorizada para completar estudio”.
Fdo: Rafael Sánchez.
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