Siempre una sonrisa, nunca un mal gesto, la dulzura en tu mirada, el poder del perdón, la amabilidad en tus gestos, la elegancia, el saber estar ... podría seguir, lineas y lineas para describirte, pero no siempre las palabras expresan los sentimientos y hoy siento rabia, incomprensión, desesperación y una desazón que se me clava en el alma.
Tú, si tú, Carmen, joven, con la vida por delante y como otros tantos una terrible enfermedad que muchos omiten pronunciar, y otros la tratan con normalidad, te ha arropado con su poder y te ha llevado con ella, allá donde queremos que estén nuestros seres queridos.
Muchos días te he visto alegre, siempre con esa sonrisa permanente en tu rostro, y una frase que no se me quita de la cabeza " ¿como estás padre?", que injusta es la vida.
Lágrimas en mis ojos me impiden ver con claridad el teclado, un nudo en la garganta me impide gritar el dolor de la injusticia, un sudor frío recorre mi cuerpo al recordarte, pero no por ello quiero dejar pasar este instante, para recordarte, llorarte y quererte.
Esta es la imagen que quiero conservar en mi memoria, os la hice en colombinas de 2013 un cuatro de agosto al finalizar el festejo, en la Puerta Principal de la Plaza de Toros de Huelva, a tu lado siempre, mi compañero, mi amigo, DIONI, como todos le conocen.
VA POR TI CARMEN, ALLÁ DONDE ESTÉS, QUE SEPAS QUE SIEMPRE ESTARÁS EN MI MEMORIA Y EN MI CORAZÓN.
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