Plaza de Toros de Valencia.
Descastada corrida de Alcurrucén en la quinta de Fallas, que no permitió a la terna lucir sus mejores armas. Padilla sin opciones ante un lote muy parado, el segundo se echo antes de entrar a matar. Abellán con solvencia en el primero, no tuvo enemigo en su segundo. Urdiales, al natural, naturalmente en su primero y en el que cerraba plaza detalles de buen gusto, pero insuficientes.
El primero de la tarde para el jerezano Padilla, no tuvo el juego deseado, ni siquiera lo banderillero al informal burel, que tampoco mejoró en la muleta. Mucho oficio y ganas en una faena inventada que no llegó a calar en la grada.
De rodillas y con una larga cambiada recibía Padilla al cuarto para recuperar la tarde. Verónicas y chicuelinas para rematarlo con revolera encendían los aplausos de la grada. Lucio en el tercio de banderillas y la grada contenta por ver al pirata en su mejor versión que no pudo expresar en su primero. Como cada tarde Padilla lo da todo, e inicio de rodillas pegado a tablas su faena, con un recorrido escaso y falta de codicia del antagonista, el jerezano porfió y lo intentó ante la nula colaboración del toro. Se echo en toro antes de entrar a matar, increíble.
Abanto de salida el segundo al igual que su hermano primero, no fue fácil para el tercio de banderillas, hasta que llegó a la jurisdicción del guerrero con su traje talismán blanco y plata. Abellán puso el mando desde el inicio de faena ante el de Alcurrucén que le dio lo que merecía en cada momento, empapado en la muleta le recetó redondos muy ceñidos y se gustó por momentos. Más informal en la zurda que no dejó expresarme al madrileño, una estocada en buen sitio el culmen de la faena.
Apostó Abellán por el informal quinto y lo brindó al respetable. Le robo muletazos a pesar de la desgana del burel por seguir los engaños que le mostraba el madrileño. La voluntad del torero se puso de manifiesto en el lote que le cupo en suerte. Un lote que no acompaño las tremendas ganas de triunfo de Abellán.
Torería en el inicio de faena del riojano Urdiales, ante el tercero de la tarde, al que enjaretó una faena de mucha enjundia. Lo templo, ligó y mandó, y de que manera, sobre todo al natural, encajado, la barbilla en el pecho, compostura y un mando sublime con pases de la firma, rematados con trincherazos de cartel de toros. Una faena que deja ver el buen momento que atraviesa el torero riojano en este inicio de temporada. Pinchazo y estocada que hace guardia.
El que cerraba la tarde de nombre "Escribano", permitió al riojano lancear con parsimonia el capote en los inicios de la faena. Informal su embestida y un cabezazo al final del muletazo no fue un obstáculo para el riojano que le sacó tandas de peso. De nuevo al natural firmó los mejores momentos de la faena. Relajación, cadencia y sentimiento en su conjunto para saborear por los aficionados.
Ficha del Festejo
Toros de Alcurrucén, de juego desigual, desclasados y desrazados.
Juan José Padilla, ovación / palmas
Miguel Abellán, vuelta tras petición / silencio
Diego Urdiales, ovación al tercio / ovación
Incidencias.- Algo más de media plaza.
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