La magia sevillana y el salero malagueño. Crónica

Fotos @santanadeyepes

Coso de la Malagueta. Sexta de feria.  Casi lleno.

Hoy es un día pletórico en la feria taurina de Málaga.  Se esperaba el no hay billetes pero finalmente sólo  se rozó. Los aledaños de la Malagueta lucían ambiente de gran tarde de toros por aquello de...esta tarde torea Morante... Y dos más.

El Genio de La Puebla formó un auténtico gazpacho con el  capote al cuarto toreando a la verónica rematando con una media para retener en la retina.

Al sacarlo del caballo lo engatusó con un quite por chicuelinas de auténtico sabor flamenco de cante jondo; fue Vega al quite no achicándose pero sin llegar a la genialidad de lo visto anteriormente. Se fue Morante a sentarse al estribo para comenzar su faena de muleta. Lo esperó y toreó en plan torero antiguo, y cuando se levantó fue para ir sacándolo hacia fuera con muletazos impregnados de profunda torería hasta terminar enroscándose en la muleta cual serpiente de cascabel. Un auténtico placer para todos los morantistas llegados de todas partes. La faena se basó prácticamente por el lado derecho por donde el toro tuvo calidad, no tratando al natural. De los medios se fue rajando a tablas y allí siguió toreando con magia.  El sevillano estaba entregado y regaló una gran serie por el pitón bueno para firmar una faena de inspiración, y el público así lo vio.  La Malagueta rugió y la espada entró a la primera. La plaza quedó rendida a sus pies y le pidieron las dos cortando solo una.

Morante no pudo hacer nada ante el Cuvillo que abrió plaza pues no tuvo opciones con el mismo.  El jabonero no le gustó al de La Puebla y casi ni lo vio. Lo probó  por ambos pitones y se fue pronto a por la espada con la que falló.  Su faena fue silenciada.

Al festín de la tarde fue invitado el malagueño Salvador Vega que se ganó la sustitución de Fortes en su primera actuación en la feria en la que cortó una oreja.  El salero malagueño hizo su aparición desde el recibo con el capote a su primero.  No quiso ser un convidado de piedra y así lo demostró  toda la tarde. Anduvo bien su banderillero Víctor Manuel Nieto, tanto en banderillas como en el manejo de capa. Vega inició  la faena de largo con la muleta totalmente planchada. El toro respondió aunque no con excesiva clase. Le realizó una faena sensata marcada por ese salero malagueño que atesora. Hubo pasajes bellísimos y estuvo en todo momento por encima del toro.  Mató de estocada y se le pidieron las dos orejas siendo concedida solo una.  Está claro que en palco presidencial de Málaga este año  hay epidemia y está prohibido conceder las dos orejas... No están caras.  Simplemente este año no están a la venta.

En su segundo toro también anduvo bien con un toro que llevaba la cara a media altura y remataba los muletazos por arriba. Resultaba muchas veces muy molesto. Lo fue haciendo poco a poco y se empleó más por el pitón derecho.  Aun así el toro nunca se entregó. Mata de pinchazo y estocada y recibe una ovación  al esfuerzo.

José María Manzanares simplemente no tuvo oponentes esta tarde. Quiso dar más pero le fue realmente complicado.  Su primero tuvo peligro sordo y se colaba por el izquierdo que era imposible darle un pase. Pinchó y estocada. En su último que ya fue la "guinda del pastel"  fue realmente negativo todo a pesar de su disposición. Se pudieron lucir esta tarde, eso sí, Curro Javier y Blázquez con la capa el primero y en banderillas. Recibió ovación de despedida.

Crónica.- Conchita Rodriguez.

Ficha del Festejo

Toros de Nuñez del Cuvillo, variado de juego.

Morante de la Puebla, verde oliva y oro. Silencio y oreja con petición.

Salvador Vega, tinto y oro.  Oreja con petición y ovación tras aviso.

José María Manzanares, negro y azabache.  Silencio y silencio.

Incidencias.-  José María Manzanares recibe un capote de paseo de manos del alcalde de Málaga como premio a una faena realizada en 2011.