Plaza de Toros de Pamplona, algo mas de media plaza, en tarde de agradable temperatura, muchos jóvenes en los tendidos, una interesante y variada novillada de El Parralejo.
Triunfador del Festejo Posada de Maravillas, que con tan solo 5 novilladas ya sabe lo que es salir por la Puerta Grande de Pamplona.
Rafael Cerro de no fallar tan clamorosamente con los aceros, hubiese acompañado a su compañero de cartel.
Javier Anton, lo saluda de capa el torero de la tierra, le receta un buen puyazo el torero a caballo de Gibraleón (Huelva), Juan Antonio Carbonell. En su turno de quite Cerro, no perdona y le hace un quite con capote a la espalda. Brinda al respetable Anton su primero, un novillo comodo de cara y estrecho de sienes, al que el pamplonica intenta acoplarse, repite el toro en sus embestidas y humilla. Molinetes y cambios de mano para quedarse colocado, toreo al natural con la figura erguida y firme la mano del torero para domeñar la embestida del burel. Se le ve fácil ante la cara del novillo. Varios pinchazos y estocada caída.
En el Cuarto de la tarde, segundo de su lote, brinda el al Maestro Ortega Cano su faena. Un novillo menos colaborador, al que Anton le pone y le expone. Muletazos al natural que avivan al respetable ante la labor de su paisano, que se crece, y receta dos series ligadas con la derecha mas templadas. Se crecía el novillo y el torero al avanzar la faena. Pinchazo y media le basto para cortar una oreja.
Rafael Cerro, farol de salida, con ramilletes de verónicas y remate a una mano, fue el saludo a su primero. Cerro brinda al público, comienzo por alto para sacarlo a los medios. Cinco naturales y un remate por alto ponen al respetable de su lado. Muy firme y seguro esta Cerro con el Novillo. Firme las zapatillas en el albero, se pasa el novillo por ambos pitones con circulares y pases de pechos rematados a la hombrera contraria. Estocada algo trasera y dos descabellos.
En el quinto de la tarde, la dimensión del torero fue a mas, un gran colaborador tenia delante, que repetía y metía la cara en los engaños, con nobleza y bondad, bien lo toreo Cerro, que se le ve muy suelto. Ligados y templados los muletazos, con cambio de mano incluido, pase del desprecio mirando al tendido. Tres tandas al natural, hondas, sentidas, toreras, bien juega las muñecas el extremeño. Remates muy toreros para cerrar al toro con la pierna flexionada. Donde no estuvo tan acertado fue con los aceros, apunto de devolverle el toro al corral. La Faena merecía Premio.
Posada de Maravillas, Posada con su desparpajo y su frescura maravillo al público pamplonica, desde que se abrió de capa. Brindo al Público su primero, del que creo esperaba mayor colaboración, muy poco colaborador, deslucido, soso, agarrado al piso y sin transmisión, lo intento Posada, pero su labor no llegaba a la grada. Estocada en buen sitio, fácil con los aceros.
El sexto de la tarde se lo brindo a su preparador, Curro Alvarez, en este lo tuvo todo, desparpajo, despaciosidad, ligazón, oponente y premio. Primeros pases de tanteo para sacar el toro del tercio, no se queda quieto y anda algo gazapon, no desespera el joven novillero que le ve algo bueno al toro, se enrabieta con el novillo y liga una serie con la derecha en redondo, mas vibrante y sólida que mete al novillo y al público en la canasta, le baja la mano y le acompaña en la embestida, el novillo va a mas. Una serie con la izquierda de cuatro naturales largos, templados y con mando, lo remata con un soberbio pase de pecho. Molinete para quedarse colocado, dos por bajo y el pase del deprecio dejan al toro en suerte. Y que suerte, estocada en todo lo alto, que hace que la grada sea un jardín de pañuelos, pidiendo los trofeos para este joven novillero, que recordamos tan solo lleva cinco novilladas.
Ficha del Festejo
Javier Anton, palmas / oreja
Rafael Cerro, ovación y vuelta al ruedo / ovación
Posada de Maravillas, silencio / 2 orejas
La frase de la Tarde de Posada de Maravillas "que grande es el toreo".
El primero de la tarde sale con piernas de los chiqueros y en la primera vuelta por tablas realiza un salto limpio al callejón, ante la sorpresa de los que allí se encontraban, sin consecuencias.
Juan Antonio Carbonell pica el primer toro de la feria, Sabueso de nombre y de 485 kg de peso.
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