Hasta seis espectáculos se
programaron para las Colombinas de hace diez años y, así, en 2.006 se
celebraron tres corridas de toros, un festejo de rejones, el cómico y otro
dedicado a los recortadores, que era la novedad que por entonces se venía
ofreciendo en los ruedos españoles.
La tarde del 2 de agosto estuvo
dedicada a los recortadores, con una amplia presencia de espectadores en los
tendidos. El día grande contó con una corrida en la que se lidiaron reses de Santiago Domecq y uno, que
abrió plaza, de La Dehesilla. Enrique Ponce cortó las dos orejas de su primero
y dio la vuelta tras oír un aviso en el otro; el Fandi cortó una oreja a cada
uno de sus oponentes mientras que El Cid la obtuvo del quinto de la tarde.
Triunfos de José María
Manzanares hijo y Alejandro Talavante, que se presentaba en Huelva en la
segunda corrida del ciclo, al cortar dos orejas cada uno en una tarde en la que
Jesulín de Ubrique también obtuvo un trofeo de los buenos toros que envió el
empresario José Luís Pereda.
Cartel extraño para el sábado 5
de agosto y, para evitar que Morante de la Puebla abriera plaza, se contó con
la actuación del rejoneador local Pedro Calero que fue ovacionado al concluir
con el novillo que reemplazó al rechazado animal de Fermín Bohórquez. Morante,
avisado en su primero, cortó las dos orejas a su segundo mientras que El Juli y
Miguel Ángel Perera lograron un apéndice al concluir con sus primeros toros.
El festejo de Rejones contó con
reses de Fermín Bohórquez. Pablo Hermoso de Mendoza pasó a la historia del coso
al ser el primer rejoneador que cortase un rabo, hecho que sucedió en el quinto
de la tarde. Andy Cartagena totalizó cuatro orejas y Fermín Bohórquez obtuvo
una.
Como siempre, el abono
colombino concluyó con el espectáculo cómico – taurino – musical de El Bombero
Torero.
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